La loperamida: un medicamento para la diarrea

La loperamida es un medicamento ampliamente utilizado para tratar la diarrea aguda o crónica no infecciosa. ¿Pero qué es la loperamida y cómo actúa en el organismo?

La loperamida actúa reduciendo los movimientos intestinales, lo cual aumenta el tiempo de tránsito intestinal. Además, promueve la absorción de una mayor cantidad de agua en el intestino, lo que hace que las heces sean menos líquidas. Esto ayuda a controlar la diarrea, ya que las heces se vuelven más formadas y disminuye la frecuencia de las evacuaciones. Es importante destacar que este medicamento no actúa eliminando la causa de la diarrea, sino que solo trata sus síntomas.

Ahora que conocemos cómo funciona la loperamida, es importante saber qué presentaciones se pueden encontrar en el mercado. La loperamida se comercializa en forma de comprimidos de 2mg, los cuales se pueden adquirir en farmacias o droguerías. Es posible encontrarla con diferentes nombres comerciales, como «Imosec», «Diasec», «Intestin» o «Kaosec». Además, también está disponible en forma genérica, bajo el nombre de «clorhidrato de loperamida».

¿Para qué se utiliza la loperamida?

La loperamida es utilizada principalmente para el tratamiento de la diarrea aguda no infecciosa. Sin embargo, también puede ser indicada para el tratamiento de la diarrea crónica espoliativa asociada a enfermedades inflamatorias del intestino, como la enfermedad de Crohn o la retocolitis ulcerosa. Además, también se utiliza para el manejo de la pérdida de agua y electrolitos en pacientes con ileostomías y colostomías.

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¿Cuál es la posología y cómo se toma?

La dosis recomendada de loperamida depende del tipo de diarrea y la edad del paciente. En el caso de la diarrea aguda en adultos, se recomienda una dosis inicial de 4 mg (2 comprimidos de 2 mg), seguida de 1 comprimido de 2 mg después de cada episodio de diarrea líquida, hasta un máximo de 16 mg al día. En el caso de la diarrea crónica, la dosis inicial recomendada es de 4 mg (2 comprimidos de 2 mg), pudiendo ser ajustada por el médico hasta alcanzar 1 o 2 evacuaciones sólidas por día. Las dosis pueden variar entre 1 y 6 comprimidos de 2 mg al día, y no se debe superar la dosis máxima de 8 comprimidos de 2 mg al día.

Es importante tener en cuenta que la dosis de loperamida en niños mayores de 6 años debe ser calculada por el pediatra, teniendo en cuenta la edad y el peso corporal del niño.

¿Cuáles son los posibles efectos secundarios?

Como ocurre con cualquier medicamento, la loperamida puede tener efectos secundarios. Los efectos secundarios más comunes observados durante el tratamiento con loperamida son el estreñimiento, mareos, somnolencia, náuseas, sequedad bucal, dolor abdominal, dolor de cabeza y exceso de gases intestinales.

En caso de presentar síntomas como diarrea acuosa con sangre o persistente, empeoramiento de la diarrea, dolor o hinchazón abdominal, latidos cardíacos rápidos o acelerados, sensación de vibración en el pecho, dificultad para respirar, sensación de garganta cerrada, hinchazón en la boca, lengua o cara, urticaria, formación de ampollas o descamación de la piel, dolor en la piel, fiebre, dolor de garganta o ardor en los ojos, se debe interrumpir el uso de loperamida y acudir a un médico de inmediato.

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Información adicional

¿Cómo prevenir la diarrea?

Además de tratar la diarrea con medicamentos como la loperamida, es importante tomar medidas para prevenir la aparición de este problema. Algunas recomendaciones para prevenir la diarrea incluyen:

  • Lavarse las manos regularmente con agua y jabón.
  • Evitar el consumo de alimentos o agua contaminados.
  • Mantener una buena higiene al manipular alimentos y utensilios de cocina.
  • Evitar el contacto con personas enfermas.
  • Evitar el consumo excesivo de alimentos picantes o grasos.

¿Cuándo se debe acudir al médico?

Aunque la loperamida puede ser de gran ayuda para controlar la diarrea, hay situaciones en las que es necesario acudir al médico. Algunas de estas situaciones incluyen:

  • Si la diarrea persiste por más de 48 horas después de comenzar el tratamiento con loperamida.
  • Si se presentan síntomas graves como fiebre alta, diarrea con sangre o empeoramiento de los síntomas.
  • Si se tienen antecedentes médicos que requieren una evaluación antes de usar loperamida.
  • Si se están tomando otros medicamentos que pueden interactuar con la loperamida.

Preguntas frecuentes

A continuación, responderemos algunas preguntas frecuentes relacionadas con el uso de loperamida:

¿Puede la loperamida ser utilizada en niños?

La loperamida puede ser utilizada en niños mayores de 6 años. Sin embargo, la dosis debe ser calculada por el pediatra, teniendo en cuenta la edad y el peso del niño.

¿Puedo conducir o realizar actividades que requieren atención mientras tomo loperamida?

La loperamida puede causar efectos secundarios como mareos y somnolencia. Si experimentas estos efectos, es importante evitar conducir o realizar actividades que requieran atención hasta que te sientas mejor.

Conclusión:

La loperamida es un medicamento ampliamente utilizado y efectivo para tratar la diarrea. Actúa reduciendo los movimientos intestinales y promoviendo la absorción de agua en el intestino, lo que ayuda a controlar la diarrea y disminuir la frecuencia de las evacuaciones. Sin embargo, es importante seguir las indicaciones médicas y acudir al médico si persisten los síntomas o se presentan efectos secundarios graves. Además, es fundamental tomar medidas de prevención para evitar la aparición de la diarrea. Recuerda siempre consultar a un profesional de la salud antes de comenzar cualquier tratamiento.

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